Hace pocas fechas, analizamos el M1 Note del fabcricante chino Meizu y pudimos comprobar lo que dice un conocido eslogan publicitario “no se engañe, la calidad no es cara”. Prueba de ello es el esfuerzo que hace esta marca china por desmarcarse de la mala reputación de otros fabricantes, que se la habían ganado tras utilizar componentes poco fiables en sus dispositivos.
Meizu deja claro que ese no es su camino a seguir, un ejemplo son algunos de los componentes que incorpora el M1 Note como el sensor de la casa Samsung y batería de la marca Sony, todo ello a precios increíblemente bajos. Como resultado se tienen terminales realmente competitivos, lo que hace pensar que marcas como Meizu llegan al mercado occidental para quedarse, y seguro que van a dar más de un quebradero de cabeza a las grandes compañías como Samsung y Apple.